EL MAM DE CHILOÉ CELEBRA SUS 25 AÑOS CON BOMBOS Y PLATILLOS
El espacio de arte contemporáneo presenta gran exposición colectiva
por Rodrigo Castillo
Situado lejos de todo y sin apoyo financiero, el espacio se ha consolidado como una importante vitrina para los creadores nacionales.
«Somos un territorio independiente dentro del arte chileno«, declara Coca González, integrante del directorio del Museo de arte Moderno de Chiloé, también conocido como MAM (Parque Municipal de Castro).
«Nosotros invitamos a los artistas para que expongan acá y dejamos que ellos hagan lo que quieran, sin juzgar ni censurar su trabajo. Mi función como curadora, es elegirlos e invitarlos«, agrega la mujer, quien forma parte del equipo de profesionales que fundó el recinto hace ya 25 años.
Precisamente para celebrar ese cuarto de siglo de existencia, la entidad acaba de inaugurar una gran exposición colectiva que incluye obras de una treintena de autores que han hecho aportes a la colección del museo.
En la muestra es posible ver creaciones de figuras consagradas (Antonio Becerro, Bruna Truffa, Arturo Duclos y Rodrigo Cabezas, entre otros) y, también, producciones de emergentes como Felipe Santander, Gianfranco Foschino y Konstanza Sheihing.
«El MAM tiene una de las colecciones de arte contemporáneo más importantes de chile, pero lo curioso es que es una entidad autónoma, porque no tiene financiamiento estatal ni de privados«, dice Antonio Becerro, quien participa en la exhibición con doce esculturas de perros que están instaladas en los techos de la casona emplazada en el Parque Municipal de Castro. «Ellos, además, han tenido que enfrentar presiones de grupos locales que quisieran que el museo difundiera el arte tradicional chilote. Es un museo que tiene clara su vocación contemporánea y para uno, como artista santiaguino, es casi poético llevar obras hasta ese rincón del fin del mundo que se siente tan lejano como si estuviera en otro país«, agrega el autor.
Felipe Santander, creador de la pieza gráfico – textil que se ve junto a estas lineas, es uno de los emergentes invitados a celebrar los 25 años del MAM, espacio que, en su opinión, ha contribuido a descentralizar la escena de la plástica chilena. «Cuando uno piensa en Chiloé tiende a imaginarse una postal, y nunca imagina que en esa zona va a encontrar propuestas de arte contemporáneo. Es súper bueno que ellos ofrezcan algo que no tiene nada que ver con la imagen preconcebida que uno tiene de Chiloé«, dice el expositor. «Ellos están muy lejos de la capital, que es donde supuestamente ocurre todo en materia de arte, y se las arreglan para hacer su trabajo usando las redes sociales y las nuevas tecnologías. Creo que el éxito del museo se debe a la gestión de las personas que hacen que todo esto suceda«, añade Santander.
«Nuestros primeros años fueron como la película ‘Fitzcarraldo’, esa donde empujaban un barco a través de la selva. Nosotros funcionamos así, a puro ñeque«, recuerda Coca González. «Empezamos exhibiendo obras de mis compañeros de la escuela de Arte y ahora ya hay niños que han crecido con nosotros y se volvieron artistas por ver todas las locuras que hemos exhibido«, concluye la mujer.
Fuente: Diario Las Últimas Noticias jueves 17 enero 2013
