FotoMAM 2016
Lugar: Museo de Arte Moderno Chiloé, Parque Municipal de Castro
Fechas: 9 de agosto al 6 de septiembre 2016
Inauguración: Martes 9 de Agosto – 12:30 hrs – Todos invitados!
Por primera vez en 28 años, el MAM abre sus puertas en agosto, mes de la fotografía, y lo celebra presentando las siguientes exposiciones: Chiloé en Blanco y Negro – 4 artistas que fotografiaron la isla a lo largo de 6 décadas (Claus Leisersohn, 1958 – Milton rogovin, 1967 – Leopoldo Plenz, 1994 – Hugo Ángel, 2015) + Re-tratados (Luis “Cicleto” Tapia) + Last work from New York (Carlos Bogni) + El eje en la luna (Catalina Juger)
Chiloé en Blanco y Negro / Cuatro artistas que fotografiaron Chiloé a lo largo de 6 décadas, cuatro miradas detenidas en la isla. En 1998 presentamos por primera vez la obra de Milton Rogovin en el MAM, con una serie inquietante de personajes fotografiados a través del tiempo. Rogovin fue parte activa del movimiento que podemos denominar como “Fotografía Social Norteamericana”, durante gran parte del siglo XX en EE. UU. Falleció en 2011, a los 101 años de edad. En aquella muestra lanzamos el libro Nada Queda Atrás, en que dialogan las fotos que Rogovin tomó en los años sesenta en Chiloé, invitado por Pablo Neruda, y los delicados poemas que Carlos Trujillo escribió a partir de ellas. Presentamos ahora, por primera vez, las 40 fotografías que componen ese libro.
A partir de esta mirada a Chiloé de hace cinco décadas, convocamos a Claus Leisersohn, de quien conocíamos fotos de Chiloé de los años 50, las que hubo que encontrar entre miles de maravillosas fotos de Angkor Vat, Rangoon y otras exóticas culturas del mundo. Leopoldo Plenz es un fotógrafo y arquitecto brasileño que pasó maravillado por estos lados en 1994, y donó al MAM, hace pocos meses, una serie de 10 fotografías en blanco y negro que retratan su paso por la isla. Hugo Ángel muestra, en la actualidad, un fenómeno de carácter religioso que no cambia con el paso de los años: la fe y el drama que envuelven a una ceremonia religiosa chilota ancestral, como es la celebración del Cristo de Caguach.
Re-tratados / Luis “Cicleto” Tapia, con la asistencia de Nicolás Muñoz y varios otros que apoyaron su iniciativa, regaló a Milton Rogovin, al cumplir sus 95 años, un video que revela la identidad de los personajes hasta entonces anónimos que éste había retratado casi cuarenta años antes.
Last work from New York / Carlos Bogni es un artista fundamental en Chile. Desde los 80 trabaja con técnicas diversas, grandes óleos, impresiones digitales y collages fotográficos. En esta muestra nos narra a través de su cámara sus peregrinajes por barrios y calles de Nueva York. Como una plegaria, Bogni repite, insiste y vuelve a transportarnos a sus paisajes urbanos.
El eje en la luna / Catalina Juger nos muestra las imágenes en que durante 2014 registró a cuatro mujeres de edad adulta que vivían solitarias en diferentes lugares de Chile, captando su relación con los entornos desolados en que viven, lejos de la ciudad y asumiendo el aislamiento y la soledad.
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Para conocer más acerca de estas personas…
MILTON ROGOVIN – 
Nueva York, 1909 – 2012. En 1942 se casó con Anne Snetski y ese mismo año compró su primera cámara fotográfica. En 1958 comenzó a tomar fotografías que comunicaban su profundo deseo de una sociedad más justa e igualitaria para todos. En 1972, obtuvo una Maestría en Artes con especialidad en Estudios Americanos en la Universidad de Búfalo, donde dictó cursos sobre Fotografía Documental hasta 1974. A lo largo de su extraordinaria carrera como fotógrafo, su trabajo ha aparecido en más de 160 periódicos, revistas y otras publicaciones. Su obra se ha mostrado en más de 30 exposiciones colectivas y en 60 exposiciones individuales. Además se han publicado numerosos libros sobre sus fotografías, muchas de las cuales forman parte de colecciones permanentes en más de una docena de museos de primer orden en el mundo, como el de la Biblioteca Nacional de París, el Museo de Arte Moderno de Nueva York, el Museo J. Paul Getty, de Los Angeles, y el Museo Victoria y Alberto, en Londres. La cámara de Rogovin ha sacado a la luz importantes asuntos sociales de
nuestro mundo, como los efectos del embargo económico en el pueblo cubano;
las miserables condiciones de vida de los mineros en varios países; la decadencia de la industria del acero en Búfalo; la celebración del espíritu en iglesias locales (storefront churches) de esa misma ciudad, y, por supuesto, las difíciles condiciones de vida de ciertos sectores de la población del sur de Chile, a donde llegó por sugerencia de Pablo Neruda en el verano de 1967.
LUIS “CICLETO” TAPIA – con «Re-Tratados» Video. Diciembre 2004, duración 30 min. Este video homenajea al fotógrafo Milton Rogovin, a quien regaló, a sus 95 años, la identidad de los retratados por él hace cuatro décadas. Sabemos así qué fue de sus vidas, removiendo las cenizas del tiempo, de la historia que se mueve a través de la inclemencia de estos cuerpos australes. El Re-trato de los personajes abre esa ventana que se había mantenido cerrada durante tantos años, mostrando las experiencias de vida de un grupo de personas, casi todas historias de día invernal, que no hacen más que demostrar el temple de la gente del sur, su sencillez y humildad.
HUGO ÁNGEL G. – con «La Isla de la Devoción». Cuaderno de Viajes Islas Australes
. El presente registro fotográfico transcurre en la isla de Caguach, la isla de la Devoción, donde año tras año se reedita una festividad religiosa única inspirada en el Cristo Nazareno, de raíces cristianas, pero revestida de ropajes indios y ancestrales. Un tiempo sagrado transcurre: durante nueve días los Deudos, Fiscales y Patronos de las 5 islas expurgan sus dolores, pagan los favores al Santo y renuevan sus fuerzas espirituales y físicas. La isla rodeada de mar, metáfora del inconsciente, espacio indeterminado de transición del tiempo profano al tiempo sagrado. El Mar es el espacio del viaje, el médium tormentoso a través del cual se accede al territorio sagrado, ahí donde el misterio y la comunión operan. Los peregrinos se fusionan en un solo cuerpo, el Egrégor, el alma colectiva. La música, las rogativas y rezos facilitan el trance grupal, como un gran mantra, el mantra de los olvidados del fin del mundo.
CLAUS LEISERSOHN – Nacido en Alemania, llegó a Chile junto a su familia siendo niño. Su formación como fotógrafo ha sido como autodidacta. Desde 1945 fotografía paisa- jes en blanco y negro, estos dan cuenta de constantes viajes a lejanos lugares como Birmania, Japón, Nepal, Patagonia, Cachemira, Thailandia, Nueva York, Antártica. En etapas posteriores, el paisaje es su fuente de inspiración para captar detalles de texturas, movimientos de juncos, arenas y superficies acuosas que llegan a ser el tema de su fotografía en color, trasformándolos en un mundo de cualidades plásticas. En FotoMAM 2016 presentamos una serie de fotografías de Chiloé tomadas por Claus en 1958, inaugurando una nueva galería de imágenes de Chiloé que el MAM comienza a rescatar y conservar. Por haberse perdido los negativos, se ha escaneado las pequeñas copias en papel existentes para obtener estas ampliaciones. Los recuerdos de ese Chiloé que visitara y fotografiara hace más de cinco décadas afloran con una nitidez asombrosa, incluso Claus destaca pormenores como el nombre o el color del barco que fotografió en la bahía de Chonchi, por ejemplo, ¡y esto ahora a sus 87 años!
Agradecemos el aporte de Fundación Mar Adentro, que financió las ampliaciones fotográficas de Claus Leisersohn y Carlos Bogni.
LEOPOLDO PLENTZ – Nació en 1952, en Porto Alegre, Brasil. A partir de 1975 se dedica a la fotografía de autor, a la docencia y a la documentación de bienes culturales. Expone sus trabajos regularmente desde 1979 en muestras colectivas e individuales. Sus obras figuran en el Museo de Arte de Sao Paulo –Colección MASP Pirelli de fotografía–; Museo de Arte Contemporáneo de Porto Alegre; Museo de Arte Latinoamericano, OEA, Washington; Biblioteca Nacional de París y Museo de Bellas Artes de Buenos Aires, entre muchos otros. Habiéndonos visitado en 1994, año en que realizó sus imágenes, luego nos escribiría diciendo: Chiloé fue un lugar que dejé en lágrimas, a medida que el barco se apartaba de ese lugar que me pareció mágico, donde tuve el deseo de permanecer.
CARLOS BOGNI – “El pintor Carlos Bogni se fue a Nueva York en 1995 y regresó a Chile en 2004, a la vieja casa de la Estación Central donde mantenía desde fines de los 80 la galería La Maldita Zorra. A pesar de haberse insertado de plano en la vida neoyorquina, no aprendió jamás a hablar perfectamente el inglés, su conversación –hablada y escrita– revelaba en todo momento la presencia de chilenismos desatados. Bogni –a diferencia del promedio– no se ensiuticó con Nueva York, no se puso más re nado de lo que era, no ornamentó sus palabras con subentendidos para iniciados. Las innumerables fotografías que Bogni tomó de Nueva York corresponden a los desplazamientos de un sobreviviente: La bicicleta me permitió peinar la ciudad desde un principio, súmale la situación de cambiarte de casa constantemente. También trabajé repartiendo comida italiana en bici durante dos años, lo que me permitía accesos a edificaciones impensables. Y dice algo más: Los que han estados tirados un una camilla saben que ese estado llega tarde o temprano e involucra la condición humana. En cuanto a la sobrevivencia, lo mismo: fuera de tu medio y ante el imperativo de comer y pagar tu pieza tienes que hacer lo que venga: lavar baños, trabajar a la intemperie veinte grados bajo cero, aguantar las bravatas de viejos miserables y soportar, lógicamente, la explotación que suele venir de tus propios compatriotas”. (De Nueva York por detrás, Roberto Merino, en revista Fibra).
CATALINA JUGER CERDA – con El eje en la luna, Proyecto fotográfico iniciado el año 2014. Consta de cuatro historias de mujeres de edad adulta y sus respectivos territorios de hábitat, estos se ubican en los cuatro extremos y zonas del territorio chileno (norte, sur, este y oeste). La particularidad de estos personajes es la convivencia con los lugares en los cuales viven, dejando la ciudad de lado y albergando la soledad a su diario vivir. En dichas realidades, de alguna manera se encuentra la recuperación de la identidad de la mujer en sus distintos roles, destacando la autonomía y convivencia que muestran con sus territorios. Son mujeres que lograron un punto de equilibrio para desarrollarse y empoderarse en un espacio que –según ciertos modos de vida– no es propicio para ellas, por lo crudos y ásperos que pueden llegar a ser. Pensamos en la sobrevivencia y la resistencia que viven estos personajes al coexistir en estos territorios extremos. Estas protagonistas aportan un viaje a mundos muchas veces ajenos a nuestra cotidianidad, que se desenvuelven bajo su propio ritmo, en donde es el ser humano el que se adapta al movimiento del entorno y no es el entorno el transformado por el hombre para su satisfacción.
