Como parte del Proyecto Isla, el MAM recibe entre el 20 de marzo y el 20 de abril 2019 a la artista Priscila Peralta, seleccionada entre otros participantes para esta convocatoria.
PROYECTO ISLA / Colectivo SE VENDE, Plataforma Móvil de Arte Contemporáneo, en Antofagasta; y Museo de Arte Moderno Chiloé invitaron durante noviembre 2018 a artistas del Norte Grande -de las primeras cuatro regiones del país- a presentar proyectos de residencia de investigación y/o producción de obra, de un mes de duración. En el mes de diciembre se seleccionaron dos artistas independientes, quienes podían postular de forma individual o en dupla. Los ganadores de esta convocatoria obtuvieron un espacio en Talleres en Residencia del MAM Chiloé. Para Colectivo SE VENDE y MAM Chiloé es muy relevante la investigación artística centrada en el contexto en el que se sitúa el artista. A éste se le ofrece la posibilidad de participar e interactuar con la cultura local, y su geografía especial, en este caso, de islas, canales y lluvia persistente; ruralidad, astilleros, faenas agrícolas o la mitología lugareña.
PRISCILA PERALTA / Mi trabajo se centra en una investigación del lugar, desde el concepto de aislamiento como un tiempo de introspección, de solitud y de encuentro. Este proceso se volvió un reconocimiento de paisajes, texturas y temperaturas cambiantes que son parte de mi memoria y por ende, de la construcción de las ideas propias y la relación con el entorno circundante, cambiante y a la vez permanente. El medio al que he recurrido es el sonido mediante la recolección de diferentes sonoridades naturales e intervenidas, desde la ruta o la propia construcción de un camino o chaquiñán (Palabra en quichua que significa atajo, camino o sendero que se va formando a través de la huella de los caminantes.).
Siempre partiendo desde la Residencia del MAM Chiloé, he concebido una bitácora de viaje que recoge el conocimiento adquirido mediante diálogos y textos, la interpretación de una cartografía previa principalmente turística y la grabación de sonidos, musicalidades y ruidos en lugares específicos. Es así como he originado hasta el momento cuatro partituras resultantes de la interpretación de elementos destacables en las grabaciones recolectadas en 10 días: Aves, viento, Agua de lluvia y golpe de agua, interpretados por instrumentos de cuerda y viento. A la vez, he podido conocer de cerca aquellas fibras vegetales que se utilizan en Chiloé para concebir tejidos con fines utilitarios como cestos, canastos y otros. Fibras como el junquillo, manila y boqui, hojas y enredaderas fuertes propias de zonas de clima frío. Durante la segunda etapa de mi proyecto de investigación, trabajaré en la construcción de un objeto sonoro que “recoja” su propia acústica, las sonoridades del entorno y se convierta en un lugar donde hospedar la composición resultante.